La buena salud, El es uno de los factores importantes de tu desarrollo; cuidarlo, alimentarlo, mantenerlo sano debe se siempre la meta. Por eso es necesario el trabajo, ejercicio físico medido y adecuado, no ingieras aquellas cosas que pueda hacerte daño como el alcohol y drogas. La belleza de tu espíritu se refleja en la forma sana del cuerpo. Recuerda que se es joven, conjuntamente con el espíritu.
El cuerpo por la unidad psicobiológica exige también salud espiritual. “En mente, sana cuerpo sano” es un dogma que se debe tener presente. La limpieza de tu espíritu es necesario para tener un desarrollo armónico que no te traiga angustias, desesperación traumas. De la forma como alimentes tu espiritualidad será tu carácter alegre, jovial, optimista.
Tu vida debe tener un proyecto, una razón de ser, actuar y vivir. Hazlo pensando en lo que quieres y puedes. Midiendo tus fortalezas, pero a la vez cuidando tus capacidades. Plantea con claridad tus ideas que crees que son tu forma de realizarte como persona. No tengas miedo, para consulta con personas mayores, lee y estudia, no dejes de hacerlo porque ahí estará tu bien, si dejas pasar el tiempo, la posibilidad de ser alguien, de realizar tus sueños y de no haber comulgado con tus sueños te llevará aun profundo sufrimiento..
Cuida tu reputación, para tener tu espiritualidad ecuánime contigo, es necesario. Entre tus amigos, tus mayores, la gente en general, tienes que saber convivir, armonizar, y desempeñarte. Eso reclama una sinceridad y un modelo de compórtate.
Recuerda que los prejuicios los hacen los hombres. Ten presente que tu mente debe dominar a tus formas instintivas. Porque ante todo eres una persona. Por eso cuídate de las exageraciones que son posturas que demuestran desajustes, de los prejuicios sociales, raciales y sexuales, a los cuales la cultura nos trae como parte del consumismo.
Debes tener recreaciones, diversiones sanas. Son parte de tu vida. La juventud es alegría de vivir posibilidad de hacer.
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